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La mochila portabebés (I): algunas experiencias

Una de mis blogeras favoritas, Krika, escribió el mes pasado un interesante post sobre las mochilas portabebés con la idea de ayudar a otras mamás que busquen información sobre el tema. Me pareció en su momento una gran idea y yo también quiero colaborar contando mi experiencia.

Lo primero que tengo que decir es que nadie de mi entorno transporta a sus hijos en portabebés sea del tipo que sea. Ni las mujeres de mi familia, ni mis amigas, ni mis vecinas. Son pocas las mujeres de mi barrio que los utilizan. No sé en otros sitios, pero desde luego por mi zona no es muy habitual. Y así pasa, que me miran por la calle. Y mucho. Sobre todo las mujeres, de cualquier edad. También las hay que me hacen comentarios. La mayoría son positivos, del tipo que a gusto se le ve ahí, qué mono, qué recogidito, ahí es donde mejor va...

Pero también he tenido que escuchar cosas menos agradables. De las peores, una señora mayor que me paró en la calle para decirme que cómo se me ocurría llevar así a un bebé, que lo podía ahogar. La contesté, bastante más amablemente de lo que debía, que en la posición correcta no iba a pasarle nada al bebé. En otra ocasión una señora muy estirada me soltó que vale que las mujeres de países tercermundistas (sic) llevaran así a los niños, pero que no entendía la moda de copiarlas que se estaba dando en Europa. Apenas me molesté en contestarle que en Europa teníamos muchas cosas que aprender de otras culturas (creo que se ofendió aún más). Y a la que peor contesté fue a una cajera en el supermercado que me dijo que no sabía cómo me atrevía a llevar así al bebé porque se me podía caer. Le dije algo así como que, obviamente, si hubiera algún riesgo para mi hijo no la usaría, a ver qué clase de madre se pensaba que era.

Otras mamás, en cambio, me han comentado que les habría encantado llevar así a sus bebés. Y yo desde aquí animo a todas las mamás que se sientan cómodas con esta forma de transportar a sus hijos que lo hagan. Es cómodo, es beneficioso para el bebé y te permite mayor movilidad, entre otras virtudes. Y para los papás de bebés prematuros, como el mío, más recomendable aún, porque esos bebés necesitan todavía más el contacto con los papás.

En el próximo post continuaré con el tema y hablaré sobre las marcas que he utilizado por si a algún padre pudiera servirle de algo mi experiencia.

PD: Además del post de Krika, recomiendo el último post de Yademásmamá sobre los niños y las nuevas tecnologías. Os dejo aquí el enlace de este interesante post, que me ha encantado porque es un tema que me preocupa bastante y sobre el que me gustaría escribir más adelante.